miércoles, 12 de mayo de 2010

No ha podido olvidar mi corazon, aquellos ojos tristes; soñadores que yo ame. La deje por conquistar la ilucion, y perdí su rastro; y ahora se que es ella todo lo que yo buscaba. Y ahora estoy aquí, buscándola de nuevo, ya no esta. Tal vez usted la ha visto, dígale que yo siempre LA ADORE y que nunca la olvide. Que mi vida es un desierto y muero yo de sed.
Y dígale también que solo junto a ella puedo respirar, no hay brillo en olas estrellas y ahora ni el sol me calienta. Y estoy muy solo aquí no se donde fue. Por favor dígale usted
Fueron tantos los momentos que la ame, que siento sus caricias y su olor esta en mi piel. Cada noche la abrasaba junto a mi. La cubría de besos entre mil caricias la llevaba a la locura